Estado de Flujo de Efectivo: Cómo Calcularlo


Ana Fernández
09/09/2025
- Planificar mejor los gastos fijos y variables.
- Tomar decisiones sobre inversiones sin poner en riesgo la operación.
- Negociar con bancos o inversionistas con datos concretos en mano.
- Mantener una relación más sana con tus proveedores y colaboradores.
- Ofrece una visión muy clara y detallada de cada flujo.
- Fácil de interpretar para gerentes y emprendedores.
- Puede ser más laborioso si no cuentas con un sistema digital que registre los movimientos automáticamente.
- Se eliminan partidas que no representan movimientos de efectivo (como depreciaciones o provisiones).
- Se consideran variaciones en cuentas por cobrar, cuentas por pagar e inventarios.
- Más rápido si ya se cuenta con estados financieros preparados.
- Es el método que suelen preferir los bancos y auditores, porque conecta directamente con el estado de resultados.
- Puede ser más difícil de interpretar para quienes no tienen formación contable.
- El método directo es ideal para quienes quieren claridad absoluta sobre ingresos y egresos.
- El método indirecto es más eficiente cuando ya cuentas con estados financieros y buscas rapidez.
- Recibiste $8.000.000 por ventas cobradas a clientes.
- De ese monto, salieron $3.500.000 en sueldos, $1.200.000 para proveedores de software y $1.000.000 en arriendo de oficina.
- En total, tus operaciones dejaron un resultado neto positivo de + $2.300.000.
- Realizaste una compra de computadores por $1.500.000. Ese gasto aparece como un flujo negativo de -$1.500.000.
- Recibiste un préstamo bancario por $3.000.000.
- Pero también pagaste $500.000 de un crédito anterior.
- El resultado neto de esta sección fue + $2.500.000.
- La empresa generó $2.300.000 positivos en sus operaciones, lo cual es una buena señal: el negocio funciona y produce liquidez por sí mismo.
- Sin embargo, gastó $1.500.000 en inversión (compra de computadores), lo que redujo el flujo disponible.
- El financiamiento aportó $3.000.000, pero parte se fue en cubrir un crédito anterior.
En los negocios no basta con mirar cuánto vendes o cuánta utilidad aparece en los reportes contables. Lo que realmente mantiene a una empresa en movimiento es el dinero que tienes disponible día a día para cubrir pagos, invertir o simplemente respirar tranquilo. El estado de flujo de efectivo es un informe que baja los números a tierra y te muestra con claridad cómo se mueve el dinero en tu empresa. Y no se trata de un documento solo para contadores, sino de una herramienta práctica que cualquier emprendedor o gerente debería entender.
¿Qué es el estado de flujo de efectivo?
El estado de flujo de efectivo, también llamado “estado de flujo de caja”, es un informe contable que muestra, de manera ordenada, todas las entradas y salidas de dinero en un periodo determinado (mensual, trimestral o anual).
A diferencia del balance general o del estado de resultados, este reporte no se enfoca en los activos o en la utilidad contable, sino en algo más tangible: la liquidez real que tiene tu negocio para pagar sueldos, proveedores, deudas e inversiones.
En palabras simples: es la foto que revela si tu empresa realmente tiene efectivo disponible o si está gastando más de lo que ingresa.
¿Por qué es importante para tu negocio en Chile?
En Chile, muchos negocios, sobre todo pymes, se enfrentan a plazos de pago largos, variaciones de costos y periodos de alta estacionalidad en las ventas.
Todo esto puede hacer que, aunque la empresa esté generando utilidades en el papel, la caja se quede corta justo en el momento en que más se necesita.
El estado de flujo de efectivo te permite tener claridad sobre esa situación. No se trata solo de saber cuánto ingresas y cuánto gastas, sino de entender cuándo ocurre cada movimiento de dinero.
Esa diferencia es fundamental para que un negocio pueda organizarse y evitar sorpresas desagradables.
Por ejemplo, imagina que tu empresa factura bien en noviembre y diciembre gracias a la campaña navideña, pero los pagos de los clientes llegan recién en enero.
Si no tienes control de tu flujo de caja, diciembre podría convertirse en un dolor de cabeza para pagar sueldos y proveedores.
Tener este control te ayuda a:
La gran ventaja es que hoy, gracias a la tecnología, ya no es necesario depender de planillas que se actualizan a mano: con herramientas como el software de
Esto te da la posibilidad de reaccionar rápido frente a cualquier cambio en tu negocio y de gestionar tus finanzas con más confianza.
Componentes del flujo de efectivo
El estado de flujo de efectivo se divide en tres grandes categorías. Cada una refleja un aspecto distinto de cómo se mueve el dinero en tu negocio.
1. Actividades operativas
Son los ingresos y egresos que provienen de la operación diaria de la empresa. Aquí entran las ventas de productos o servicios, los pagos a proveedores, sueldos, arriendos y todo lo que hace que el negocio funcione en el día a día.
Ejemplo: Una cafetería en Providencia registra como entradas las ventas de café y pasteles, y como salidas los pagos a proveedores de granos, arriendo del local y remuneraciones de baristas.
Este flujo es el que mejor refleja si la empresa se sostiene con su actividad principal o si depende de otras fuentes de financiamiento.
2. Actividades de inversión
Incluyen los movimientos de dinero relacionados con la compra o venta de activos a largo plazo. Aquí se consideran maquinarias, vehículos, terrenos o incluso inversiones financieras que la empresa realice.
Ejemplo: Una pyme de confección compra una máquina de coser industrial en Santiago Centro. Ese desembolso aparece en el flujo de inversión como egreso. Si más adelante vende una de sus máquinas antiguas, ese ingreso también se registra en este apartado.
3. Actividades de financiamiento
Son los ingresos y egresos asociados al capital y las deudas de la empresa. Es decir, los préstamos bancarios, aportes de los socios, emisión de acciones o pago de dividendos.
Ejemplo: Una startup de tecnología obtiene un crédito de CORFO para escalar su negocio. Ese préstamo ingresa en el flujo de financiamiento como entrada. Posteriormente, cuando la empresa paga las cuotas del crédito, esas salidas también se reflejan aquí.
En conjunto, estas tres categorías te permiten ver de dónde viene tu liquidez y hacia dónde se dirige. Si un negocio tiene un flujo operativo negativo pero se sostiene solo con financiamiento, es una señal de alerta. En cambio, un flujo operativo positivo, acompañado de inversiones estratégicas, suele ser un indicador de crecimiento sano.
Métodos para calcular el flujo de efectivo
Existen dos enfoques habituales para elaborar el flujo de efectivo: el directo y el indirecto. Ambos llegan al mismo resultado final, pero lo hacen de maneras distintas y cada uno tiene ventajas y limitaciones.
Método directo
Este método consiste en registrar de forma explícita todos los ingresos y egresos de efectivo durante el periodo analizado. Se detallan las entradas por ventas, los pagos a proveedores, sueldos, impuestos y cualquier otro movimiento de dinero real.
Pros:
Contras:
Ejemplo: Una tienda online anota como ingresos los pagos recibidos vía transferencia y tarjetas, y como egresos el arriendo de su bodega en Ñuñoa y los sueldos de sus dos trabajadores.
Este método es especialmente útil para negocios pequeños que desean ver con precisión cómo se mueve la caja cada mes.
Si quieres ver un desglose más detallado puedes revisar el artículo Flujo de Efectivo Método Directo: Cómo se Calcula.
Método indirecto
En este caso, se parte del resultado neto contable (utilidad o pérdida) y se van haciendo ajustes:
Pros:
Contras:
Ejemplo: Una empresa de diseño gráfico registra una utilidad neta de $3 millones. Al aplicar el método indirecto, resta la depreciación de equipos, descuenta el aumento en cuentas por cobrar (clientes que aún no pagan) y suma el aumento en cuentas por pagar (deudas aún no saldadas). Con esos ajustes obtiene su flujo de efectivo real.
En resumen:
Ejemplo práctico de flujo de efectivo
Imagina que tienes una pequeña empresa de servicios de marketing digital en Santiago y quieres revisar cómo cerró tu flujo de efectivo en julio.
En las actividades operativas:
En las actividades de inversión:
Finalmente, en las actividades de financiamiento:
Al sumar todas las actividades, el flujo de efectivo total del mes cerró en + $3.300.000.
Interpretación del resultado
En total, el flujo de efectivo cerró con $3.300.000 positivos, lo que significa que la empresa no solo cubrió sus gastos, sino que también fortaleció su caja para los meses siguientes.
La empresa logró generar dinero con su operación principal, invirtió en nuevos computadores y además fortaleció su liquidez gracias al financiamiento bancario.
Lo clave aquí no es solo mirar el número final, sino entender de dónde provienen esos recursos: si el negocio vive solo de préstamos, hay un problema; si, como en este ejemplo, el flujo operativo es positivo, se trata de un escenario más sostenible.
Buenas prácticas para manejar el flujo de efectivo
Llevar el flujo de efectivo al día no es solo cuestión de hacer cálculos una vez al año, sino de mantener una disciplina constante. Lo primero es registrar cada ingreso y cada gasto en cuanto ocurren.
Postergar esa tarea suele llevar a olvidar movimientos importantes y a que el reporte muestre una realidad incompleta.
También conviene revisar el flujo con frecuencia. Un control mensual es un buen punto de partida, aunque si tu negocio tiene alta rotación de caja, como sucede en comercios minoristas o servicios con muchos pagos diarios, hacerlo cada semana puede ayudar organizar mejor los pagos.
Otra práctica clave es planificar los gastos en función de los ingresos reales, y no solo de lo que está facturado. Los plazos de pago pueden extenderse, por lo que asumir compromisos grandes antes de contar con el dinero puede convertirse en un riesgo innecesario.
La tecnología también juega a tu favor. Manejar planillas manuales cuando tu negocio está comenzando puede ser suficiente, pero a medida que crece, el trabajo y la complejidad aumenta y los errores pueden multiplicarse.
Usar un software de gestión como
Finalmente, nunca está de más contar con un pequeño colchón de liquidez. Tener guardado el equivalente a uno o dos meses de gastos operativos te da tranquilidad y te permite enfrentar épocas de baja demanda sin comprometer la continuidad del negocio.
Si quieres profundizar en estrategias concretas para optimizar tu flujo de efectivo, no dejes de leer Cash Flow: Cómo Optimizar el de tu Empresa, allí encontrarás tácticas muy útiles y aplicables para mejorar tu liquidez de manera sostenida.
Preguntas frecuentes
¿Puedo tener utilidad positiva y flujo de efectivo negativo?
Sí, es posible. Esto ocurre cuando las ventas están registradas como ingresos en tus estados contables, pero aún no han sido cobradas, lo que genera un desfase en la liquidez real.
¿Cómo saber si mi flujo de efectivo es saludable?
Un flujo positivo y constante en las actividades operativas suele indicar buena salud financiera. Si el flujo depende siempre de préstamos o aportes de capital, puede ser una señal de alerta.
¿Qué impacto tiene el flujo de efectivo en la obtención de financiamiento?
Los bancos y entidades financieras suelen revisar este reporte antes de otorgar créditos, ya que muestra tu capacidad real de generar efectivo y de pagar obligaciones.
¿Cuál es la diferencia entre flujo de efectivo proyectado y real?
El flujo real refleja lo que ya ocurrió en tu negocio durante un periodo. El proyectado, en cambio, es una estimación futura que sirve para planificar inversiones y prever necesidades de liquidez.